CARTES AL DIARI.
Al llegar la Navidad, siempre surge la polémica sobre si es necesario invertir más o menos presupuesto para la decoración navideña del pueblo. El debate se centra mayoritariamente en si además del efecto puramente decorativo y navideño, esto puede tener una rentabilidad de la que pueda beneficiarse el pueblo, principalmente los comercios.
Un ejemplo muy mediático de estos últimos años es el caso de la ciudad de Vigo. Las declaraciones del alcalde de Vigo, Abel Caballero, “me va a llamar el alcalde de Nueva York y me va a decir que me tiene sana envidia porque las luces de Navidad en Vigo son las mejores del planeta” generaron una gran polémica hasta el punto de que “el New York Times reprendió al alcalde de Vigo por las luces navideñas en plena lucha contra el cambio climático” declara el periódico 20minutos. No obstante, uno de sus objetivos sí se ha cumplido, y es que ha convertido a Vigo en un destino turístico navideño al que visitan miles de turistas durante la navidad. “El último mes del año de 2019 subió el 50 por ciento la cifra de pernoctaciones hoteleras por el efecto luces de Navidad. La Navidad viguesa colocó a los hoteles de la ciudad al frente de Galicia, superando en diciembre tanto en viajeros como en pernoctaciones los datos de A Coruña y Santiago, un hecho realmente histórico” según el periódico Atlántico.
Sin irnos tan lejos, esta Navidad, Sabadell nos ha sorprendido con una propuesta de decoración navideña muy novedosa, acompañada de una planificación de actividades que han generado un gran movimiento de visitantes y de dinamización comercial. Sabadell cuenta con diversas atracciones como la fachada del Ayuntamiento convertida en un calendario de adviento junto con el espectáculo de Somriu Nadal, la Fira de Santa Llúcia, el Pessebre Monumental… además “este año el recorrido será de sur a norte de la ciudad” expresa el diario de La Vanguardia.
La situación de estas dos ciudades nos lleva a la conclusión que invertir en decoración navideña y en una buena planificación de actividades por toda la ciudad comporta rentabilidad y beneficios para la ciudad. Además, se puede compatibilizar con la sostenibilidad medioambiental y la protección sanitaria de la población.
Comparando estos dos ejemplos con Sant Quirze del Vallés, una de las ciudades con mayor renta per cápita de España, el resultado es desolador. En este caso, no es debido a la falta de recursos económicos, sino a la falta de implicación con la población local y el comercio por parte del gobierno municipal y sobre todo, falta de visión de futuro. Actualmente, os invito a pasear por Sant Quirze y a observar la decoración minimalista y casi inexistente que hace el pueblo más sombrío, fijémonos en la iluminación que tiene. Esta decoración, además, se concentra en el centro del pueblo, dejando sin luces al resto de los vecinos.
Finalmente, con este escrito me gustaría que el gobierno municipal se implicara más con los vecinos y sus necesidades, como es en el caso de los beneficios de la decoración navideña. Y no traten simplemente de “cubrir el expediente”.
¡Felices Fiestas!
Lorena Fernández,
Vecina de Sant Quirze del Vallés
