CARTES AL DIARI.
En estos días, se está celebrando el juicio del “caso máster”, que sienta en el banquillo a Cristina Cifuentes, acusada de inducir a la falsificación del acta del trabajo final de máster (TFM), que cursó en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) y la Fiscalía pide tres años y tres meses de cárcel contra la ex presidenta de la Comunidad de Madrid. ¿Se trata de un máster comprado?
Cuando estaba cursando los años de doctorado, previos a realizar la tesis doctoral, por cortesía y cercanía, era un buen conocido y colega profesional, pase a saludar a un alto cargo en el Decanato de mi Facultad. Me lleve una gran sorpresa –no puedo decir que grata–, cuando éste me propuso: “Ana, presenta 8 o 10 folios escritos de lo que quieras, por ser tú tienes el aprobado de la tesis garantizado”. Nunca he olvidado mi respuesta: “No sabes cómo te lo agradezco, si un día en clase me hacen una pregunta que no se contestar, diré que voy a consultarla y después la comentaremos, pero espero que nunca un alumno me pueda sacar los colores diciéndome que mi tesis no es un trabajo original ni yo soy su autora”.
Al salir de este despacho, no pude evitar hacer una reflexión de la experiencia que acababa de vivir: yo no he aceptado este acuerdo y a mí me lo han ofrecido gratis. Y me vinieron dos preguntas muy preocupantes: ¿cuántas personas lo habrán aceptado y a qué coste? ¿Sucede lo mismo en los masters?
Está claro que, la ex presidenta de la Comunidad de Madrid, no es un buen modelo de referencia, sino todo lo contrario, perjudica seriamente al mundo de la docencia, en el que profesores cualificados transmiten sus conocimientos al alumnado y demuestran que su labor es vocacional y no tiene precio, ni se compra ni se vende.
Ana Lucrecia Baschwitz Gómez de las Bárcenas.
Licenciada en Publicidad y RRPP (1982). Doctora en CC de la Información (1997) por la Universidad Complutense de Madrid. Directiva de Relaciones Públicas. Asesora de Imagen y Comunicación, desde hace más de 30 años.
